Thursday, February 14, 2013

Imágenes

“Y no quiero llantos.  La muerte hay que mirarla cara a cara. ¡Silencio! (A otra hija.) ¡A callar he dicho! (A otra hija.) ¡Las lágrimas cuando estés sola! Nos hundiremos todas en un mar de luto.  Ella, la hija menor de Bernarda Alba, ha muerto virgen. ¿Me habéis oído? ¡Silencio, silencio he dicho! ¡Silencio!

–Bernarda en La casa de Bernarda Alba


Bernarda Alba dice esta cita al final de la obra La casa de Bernarda Alba.  Recientemente la hija menor de Bernarda se suicidio.  Bernarda no da consuelo a sus hijas pero ella les manda que callen.  Ella aún dice que Adela, su hija menor, ha muerto virgen.  En realidad Adela no murió virgen.  Bernarda trata de esconder la realidad y mantener una imagen buena con sus vecinos.  Aunque la casa de Bernarda Alba no esta bien, Bernarda quiere los demás piensen que todo esta en orden en su casa.  Sabemos que Bernarda es mala y va al extremo para mantener esta imagen; pero querer tener una imagen no solamente esta mostrado en esta obra teátrica.  A veces queremos mantener una imagen como Bernarda. 

A veces queremos mostrar a alguien que somos mejores de los que somos en realidad.  Pensamos que una persona nos va a juzgar o burlar de nosotros si descubren quienes somos realmente.  Queremos que ellos piensan bien de nosotros porque tienen mucho dinero, son bellas o guapos, etc.  Esto me hizo pensar en la película Aladdin.  Aladdin tiene que robar comida para vivir.  Aladdin y la princesa del palacio se conocen en la calle.  Aladdin mienta a Jasmine, la princesa, de su origen.  Aladdin se enamora de ella y después se da cuenta que es la princesa.  Después de muchos acontecimientos, Aladdin se encuentra con un genio.  El genio hace que Aladdin sea un príncipe.  Aladdin se reúne con Jasmine y sigue mintiendo a ella.  Aladdin se da cuenta que ha estado tratando de ser una persona que no es, después de muchas problemas.

 Aladdin Y Jasmine

A veces ponemos una máscara para ocultar quienes somos.  Pero esto es más difícil que decir la verdad.  Las mentiras de Aladdin le causó problemas.  Si Bernarda no hubiera preocupada por mantener una imagen, tal vez tendría felicidad en la casa.  Si somos honestos, estaremos más felices.  Tratar de mantener una imagen de mentiras lleva problemas.       

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